EL PRINCIPIO DE ORO DE LOS DERECHOS HUMANOS. TONELADAS DE DIÓGENES

EL PRINCIPIO DE  ORO DE LOS DERECHOS HUMANOS.

TONELADAS DE DIÓGENES

En la médula misma de LOS DERECHOS HUMANOS rige un principio básico que debe ser asumido como REGLA EXCEPCIONAL PRÁCTICA DE ORO en la  desaplicación de estos derechos.

Ese Principio es el siguiente:

LA DIGNIDAD HUMANA, PESE A SER INHERENTE A TODOS LOS SERES HUMANOS,  DEBE OBVIARSE EN SU RECONOCIMIENTO Y APLICACIÓN PRÁCTICA. CUANDO SE TRATA DE SUJETOS QUE. AUNQUE SE DIGAN Y SE CREAN HUMANOS, PERPETRAN DELITOS CONTRA LOS DERECHOS HUMANOS, PORQUE ESTÁN HACIENDO RENUNCIA TÁCITA A LOS EFECTOS BENÉFICOS DE LA DIGNIDAD HUMANA, QUE JUSTAMENTE HAN PERDIDO MÁS ALLÁ DE LA TEORÍA,  DEBIDO A LA NATURALEZA DE SUS ACTOS.

EN ATENCIÓN A LA ESENCIA BENEFACTORA DE LOS DERECHOS HUMANOS, QUIENES LOS VIOLAN DEBEN TENER PRESENTE QUE SIN DERECHO ALGUNO Y SIN RAZÓN,  LE JODEN LA VIDA Y LA FELICIDAD A OTROS SERES HUMANOS, CUYO MALTRATO NADA JUSTIFICA BAJO NINGÚN PRETEXTO, NI SIQUIERA POLÍTICO.